Un dormitorio con buen feng shui puede incluso compensar otros defectos de la casa, en otras palabras, ¡no hay mejor cura que un buen descanso! Estos son los tipos más importantes que debes considerar para armonizar tu dormitorio.
La posición de la cama es esencial y debe seguir los siguientes criterios:
La cabecera de la cama debe apoyarse sobre la pared más alejada de la puerta y la cama no debe estar en línea recta con la puerta, pues la llaman la «posición de los muertos», y es que cuando no había tanatorios, los dormitorios principales se hacían con una puerta amplia frente a la cama (te imaginas para qué, ¿verdad?)
La cama debe tener respaldo, pues simboliza solidez y seguridad en la vida. No debería haber ventanas o espejos justo detrás de la cama, ya que pueden debilitar la sensación de respaldo. Si hay una ventana colócale cortinas bien pesadas, si hay un espejo, muévelo a otro lugar. Tampoco debería haber nichos o estanterías sobre la cabecera, ni cuadros con marcos muy pesados: dormir con algo que el día menos pensado se te pueda caer encima de la cabeza no es muy relajante.
Es preferible que no haya nada colgando sobre la cama. Si esto fuera inevitable, procurar siempre que se trate de cosas livianas, Ej.: lámparas de papel u otros materiales livianos. En lo posible, evita los ventiladores de techo sobre la cama.
Una regla clásica del Feng Shui dice que no debe haber más de un espejo en el dormitorio y que uno no debe verse desde la cama mientras está acostado. Es buena idea atenerse a esta regla. Los espejos deben tratar de ubicarse siempre donde nos devuelvan la mejor imagen de nosotros mismos.
El cielo raso del dormitorio no debe ser muy alto, pero tampoco debe inclinarse sobre la cama. Si tu dormitorio tiene el cielo raso muy alto considera la posibilidad de usar un dosel, éste también es muy útil si el cielo raso del dormitorio tiene vigas grandes.
Al mudarse, cambiar de pareja o iniciar un trabajo nuevo es ideal cambiar de cama o al menos cambiar la ropa de cama.
Es muy importante lo que se pone sobre la mesita de luz : se deben disponer objetos (fotos, recuerdos) que ayuden a mantener un estado de ánimo óptimo. Evita tener cualquier cosa relacionada con tu trabajo o con obligaciones incumplidas (por ejemplo: facturas pendientes).
Reduce al mínimo indispensable el número de aparatos electrónicos en el dormitorio, especialmente en las mesas de noche. Si es posible, evita los teléfonos inalámbricos pues emiten ondas electromagnéticas de bastante intensidad..
Si hay un baño contiguo al dormitorio, la cabecera de la cama no debería apoyarse sobre la pared que da al baño. Si no queda más remedio que sea así, reviste la pared del lado del dormitorio con corcho o tela.
Y hasta aquí los consejos más básicos para aplicar un poco de feng shui en tu habitación más íntima.